Imagen del blog "Criatura Nocturna"
Camina por senderos oscuros, con palabras ajenas con recuerdos perdidos en un corazón vagabundo que lo sigue como perro fiel, escudando en su locura una sola razón para empaparse de ti.
Sus ojos de un claro oscuro que enternece el alma del que no lo conoce, se pierde en una primera percepción. Sus zapatos gastados de tanto caminar levantan el polvo que parece detenerse en la ingravidez de un minuto perdido, en el que el péndulo del tiempo no puede encontrar su camino de retorno.
Una gabardina cubre su cuerpo, y las sombras de una noche sin estrellas oculta la mayor parte de su rostro, pisa el césped con cuidado, preocupado de que sus huellas no queden grabadas en su andar y delaten el camino.
Llega a la lápida de sus palabras, aquellas que había intentado olvidar por tanto tiempo, se detiene por fin en la cumbre de un destino que no le pertenece e intenta volver a poner en papel lo que muchas veces dejó escapar de su mente.
Se arrodilla rendido por el recuerdo, conformándose a vivir en una vida sin ella, olvidando sus palabras, prisioneras de la tinta que nunca pudo ser derramada.
He puesto bajo tu pasado una lápida que me obliga a olvidarte…
He puesto en mi mente mentiras que te acercan y verdades que te alejen…
He puesto sobre mí la responsabilidad de nunca más amarte por respeto al amor de otra mujer...
Y sobre ti…
Sobre ti se posa la esperanza de estar equivocado.
Sus ojos de un claro oscuro que enternece el alma del que no lo conoce, se pierde en una primera percepción. Sus zapatos gastados de tanto caminar levantan el polvo que parece detenerse en la ingravidez de un minuto perdido, en el que el péndulo del tiempo no puede encontrar su camino de retorno.
Una gabardina cubre su cuerpo, y las sombras de una noche sin estrellas oculta la mayor parte de su rostro, pisa el césped con cuidado, preocupado de que sus huellas no queden grabadas en su andar y delaten el camino.
Llega a la lápida de sus palabras, aquellas que había intentado olvidar por tanto tiempo, se detiene por fin en la cumbre de un destino que no le pertenece e intenta volver a poner en papel lo que muchas veces dejó escapar de su mente.
Se arrodilla rendido por el recuerdo, conformándose a vivir en una vida sin ella, olvidando sus palabras, prisioneras de la tinta que nunca pudo ser derramada.
He puesto bajo tu pasado una lápida que me obliga a olvidarte…
He puesto en mi mente mentiras que te acercan y verdades que te alejen…
He puesto sobre mí la responsabilidad de nunca más amarte por respeto al amor de otra mujer...
Y sobre ti…
Sobre ti se posa la esperanza de estar equivocado.
4 comentarios:
Sobre ti posa la esperanza de estar equivocado...
Vaya frase, Rodri...
(tanto dolor resignado...)
Fantástica para cerrar un buen texto.
Me alegra tu vuelta!
besos para ti y para Lima!
Lena, gracias por el comentario, si, intentó sacar por lo menos unas horillas a la semana para volver a los relatos, espero no perderme tan seguido...escribir es mi hobbie preferido y lo extrañaba bastante
Gracias!
Asuuuu...te inspiraste jejejeje
En q andas, Rodri? sigues con mucho trabajo?
Escribirás más seguido? u_U
Lara, hey como estás, si, tengo mis regresos esporádicos pero intentaré (ahora sin promesas para no quedar mal)...escribir más....
Gracias por acordarse de mí,
Cuídate
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